¿Cuáles son los diferentes tipos de cloud computing?

Al adoptar la arquitectura en la nube, hay tres tipos distintos de modelos de despliegue en la nube que ayudan a ofrecer servicios de cloud computing: nube pública, nube privada y nube híbrida. 

Las nubes públicas proporcionan recursos a través de Internet, como recursos de computación, almacenamiento, red, entornos de desarrollo y despliegue y aplicaciones. Estos servicios pertenecen y los ejecutan proveedores externos de servicios en la nube, como Google Cloud.

Las nubes privadas las crea, ejecuta y utiliza una sola organización, normalmente on‐premise. Ofrecen un mayor control, personalización y seguridad de los datos, pero conllevan costes y limitaciones de recursos similares a los de los entornos de TI tradicionales.

Los entornos que combinan al menos un entorno de computación privado (infraestructura de TI tradicional o nube privada, incluida la perimetral) con una o varias nubes públicas se denominan nubes híbridas. Gracias a ellas, puedes aprovechar los recursos y servicios de diferentes entornos de computación y elegir el que mejor se adapte a las cargas de trabajo. 

Al hablar de los tipos de despliegue en la nube, puede que también escuches el término "entorno multinube". De hecho, estudios del sector muestran que casi el 90 % de las empresas se consideran ahora multinube, lo que significa que combinan servicios en la nube de al menos dos proveedores de servicios en la nube distintos, ya sean pública o privada. Adoptar una estrategia multinube te ofrece una mayor flexibilidad para elegir las soluciones que mejor se adapten a las necesidades concretas de tu negocio y, además, reduce el riesgo de depender de proveedores. 

A pesar de que la nube híbrida y la multinube se usan a veces indistintamente, un enfoque de nube híbrida puede considerarse multinube, pero solo si emplea servicios de varios proveedores de nube pública. 

Dentro de los modelos de despliegue en la nube, hay varios tipos de servicios en la nube, que incluye la infraestructura, las plataformas y las aplicaciones de software. Los modelos de servicio en la nube no se excluyen mutuamente y puedes usar más de uno en combinación o incluso todos a la vez. 

Estos son los tres modelos principales de servicios en la nube: 

IaaS ofrece recursos de infraestructura bajo demanda, como recursos de computación, almacenamiento, redes y virtualización. Con IaaS, el proveedor de servicios posee y opera la infraestructura, pero los clientes tendrán que comprar y gestionar software, como sistemas operativos, middleware, datos y aplicaciones. .

PaaS proporciona y gestiona recursos de hardware y software para desarrollar, probar, entregar y gestionar aplicaciones en la nube. Normalmente, dentro de oferta de PaaS, los proveedores ofrecen middleware, herramientas de desarrollo y bases de datos en la nube.

SaaS ofrece una pila de aplicaciones completa como servicio a los que los clientes pueden acceder y usar. Las soluciones SaaS suelen ser aplicaciones listas para usar, que gestiona y mantiene el proveedor de servicios en la nube. .

La computación sin servidor de los modelos de servicio en la nube también se denomina función como servicio (FaaS). Se trata de un modelo de servicio en la nube relativamente nuevo que proporciona soluciones para compilar aplicaciones como funciones simples activadas por eventos sin tener que gestionar ni escalar ninguna infraestructura. .

Una analogía sencilla para ayudar a recordar la diferencia entre IaaS, PaaS, SaaS y las soluciones sin servidor es enfocar los modelos como si comieras pasta fresca. Puedes elaborarla desde cero (en un centro de datos on‐premise) donde compras los ingredientes básicos para prepararlo todo, como la salsa y la masa. 

Sin embargo, la mayoría de nosotros no tenemos tiempo suficiente o no queremos dedicar mucho tiempo y esfuerzo a comer un plato de pasta. En su lugar, puedes elegir entre las siguientes opciones: 

• IaaS: compras los ingredientes envasados, como pasta fresca y salsa hecha por otra persona, y los usas para cocinar en casa. 
• PaaS: pides comida para llevar o a domicilio, lo que implica que la comida ya está preparada y no tienes que preocuparte por los ingredientes ni cómo se cocina, pero sí por dónde te la vas a comer, los utensilios y limpiar después de la comida.  
• SaaS: llamas con antelación al restaurante y pides la comida que quieras. Te preparan todo con antelación para que lo único que tengas que hacer sea ir allí y comer.
• Sin servidor: sales a cenar y pides pasta en un restaurante, ya sea solo o con amigos. Pagas y comes lo que quieras, y el restaurante se asegura de que dispone de suficientes ingredientes y personal para hacer el pedido sin tener que esperar mucho tiempo.

La tecnología de cloud computing sigue acelerando la transformación digital y se lo proporciona todo a las organizaciones: desde computación y almacenamiento hasta bases de datos en la nube, herramientas de desarrollo y analíticas de datos avanzadas, así como funciones de IA y aprendizaje automático. 

Al mismo tiempo, el coste del cloud computing supone un ahorro significativo en comparación con la tecnología e infraestructura de TI tradicionales. En lugar de tener que aprovisionar, crear y mantener costosos centros de datos, las empresas pueden optar por usar servidores virtuales y otras soluciones de TI basadas en la nube en los que solo pagan por lo que consumen. 

Elegir un modelo de despliegue y de servicio en la nube es una parte básica, pero necesaria, de la adopción de la nube. Si bien la implementación y el uso de cloud computing siempre serán únicos respecto a otras empresas, es importante que conozcas las ventajas y limitaciones de los diferentes tipos de cloud computing para que puedas comprender cómo afectarán a tu negocio.