La ciberseguridad nunca ha sido sencilla. Y como los ataques evolucionan cada día y los atacantes son cada vez más ingeniosos, es fundamental definir correctamente la ciberseguridad e identificar la calidad de la misma. ¿Por qué es esto tan importante?
Porque año tras año, el gasto mundial en ciberseguridad sigue aumentando. Las empresas empiezan a darse cuenta de que el malware es un producto de uso público que permite a cualquiera convertirse fácilmente en ciberatacante. Además, cada vez son más las empresas que ofrecen soluciones de seguridad que apenas sirven para defenderse de los ataques.
La ciberseguridad requiere concentración y dedicación. La ciberseguridad protege los datos y la integridad de los recursos informáticos que pertenecen a la red de una organización o se conectan a ella. Su objetivo es defender esos recursos frente a todos los agentes de amenazas a lo largo de todo el ciclo de vida de un ciberataque.
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